El 8 de Diciembre de 1889 se celebró en la Plaza de Toros de Cádiz una novillada, donde se lidiaron reses de de las ganaderías de Majón y Mira que cumplieron bien.
En el primer novillo hubo un incidente muy desgraciado al dar un pase a este bicho Manuel Diaz "Lavi" fue perseguido hasta tablas y enganchado por la res, que le produjo una herida cuyo parte facultativo era de muy grave.
El publico se impresionó mucho con este suceso, el diestro se levantó del suelo creyendo en aquel instante que no había sufrido nada, pero ya al levantar el brazo notó algo, se llevó la mano al costado y vaciló un tanto.
Entonces sus compañeros lo cogieron en brazos y lo llevaron a la enfermería. Campo remató al animalito de una caída con el aplauso del publico.
En los demás toros estuvieron los espadas desgraciados, excepto lobito que toreó y mató bien al quinto. El Ecijano que tiene simpatías aquí en este publico, no hizo nada notable con la muleta como otras veces.
En la briega quedó mejor que todos sus compañeros este diestro.
De los banderilleros hubo mucho malo y poco bueno.
De los picadores, El Arriero, Valiente.
La entrada buena en el sol y vacía la sombra.
La presidencia, a cargo del Sr. Antevas, acertada.
Los Espadas vestían como sigue:
"El Lavi" y "El Boto" : Azul y Oro
"Ecijano y Pepete": Verde y Oro
"Campo" : Marrón y Oro
"Lobito" : Rosa y Oro
Las Heridas de "Lavi"
Este diestro recibió dos heridas, una dilacerante, de seis centímetros en la región costo lateral izquierda, en sentido transversal, de atras adelante, penetrante de pecho, con fractura de la séptima y octava costilla con hemorragia interna, de pronostico gravísimo; y otra dilacerante dé diez centímetros por debajo del maxilar inferior, que se extiende al mentón y el borde superior de la mandíbula, dejando el maxilar al descubierto. El toro que era negro de la Ganadería del Majón.
El Lavi fue curado en la enfermería de la Plaza por el acreditado Profesor Sr. Armelin y después trasladado a su casa, calle de Puerto Chico.
Celebramos el alivio del simpático diestro.
La abertura de su herida tiene más de cuatro centímetros, y se supone que la profundidad es de acaso el triple.
(La Palma de Cádiz Lunes 9 de diciembre de 1889).
Comentarios
Publicar un comentario